Breaking Bank: NPS, una herramienta de presión contra la plantilla de Banco Santander

En este nuevo episodio de la serie Breaking Bank, desde CGT Banco Santander ponemos el foco en uno de los principales instrumentos de presión que sufre la plantilla: el NPS (No Paran de Presionar).

Aunque el banco presenta el NPS como un medidor de calidad del servicio, la realidad que vive la plantilla es muy distinta. El NPS en Banco Santander influye directamente en la evaluación de desempeño, los ascensos, las reubicaciones, los despidos y el cobro del variable, convirtiéndose en un mecanismo de control y castigo.

A través de situaciones reales, el episodio muestra cómo se penaliza a la plantilla por decisiones que no dependen de su profesionalidad: cierres de oficinas, falta de personal, políticas de riesgos, fallos informáticos o incluso valoraciones absurdas de la clientela. Especialmente grave es el uso de detractores anónimos, sin trazabilidad ni posibilidad de defensa, que aparecen de forma sospechosa al cierre de trimestre.

Desde CGT denunciamos también la manipulación de encuestas, las presiones para obtener puntuaciones altas y el uso del NPS como excusa para reducir el variable, aun cuando los objetivos comerciales se han cumplido.

La calidad no se construye presionando, se construye cuidando a las personas trabajadoras y a la clientela.